The Punisher la serie más sangrienta que ha hecho la unión Marvel y Netflix

La serie final que este año saca Marvel-Netflix cumple con lo que se esperaba al ser la serie más sangrienta y sin tanta censura como se lo esperaba de este personaje, nos muestra lo que sucede después de su última aparición que fue en la serie de Daredevil en su segunda temporada donde se introducía este personaje, haciendo que su serie no cuente tanto con una historia de inicio.

El comienzo de la serie es después de un año de lo acontecido en Daredevil, como se esperaba de The Punisher la serie inicia mostrando varios asesinatos hechos por él, contando lo que hizo durante ese año.

No esperes a que se enfrente a un super villano. Éstas series de Netflix tienen antagonistas más realistas y apegados a la realidad. Para esta serie, el enemigo principal es un tanto más oscuro y que requerirá de que Frank Castle investigue a sus aliados más cercanos, a los pocos de ellos.

Lo que siento muy repetitivo es, que como ocurre con otras adaptaciones de héroes con origen trágico, repiten la muerte de su familia una y otra y otra y otra vez. Y un tema que está muy presente a lo largo de toda la serie, son las consecuencias que tiene la guerra en los veteranos. Tanto Frank Castle como otros personajes han quedado muy afectados por su pasado, y tienen problemas para reincorporarse a la sociedad.

Cuenta con dos personajes que ya han salido en anteriores series como lo son el personaje que hace Deborah Ann Woll ( Karen Page) y Geoffrey Cantor (Mishell Ellison) que han aparecido ya en las diferentes series de la alianza Netflix-Marvel, también contando con nuevos personajes que ayudan demasiado al trama de la serie.

Siendo esta la primera serie después de mucho tiempo que tiene un personaje que me hace empatizar mucho con él, creando un gran lazo diferente al que se tiene

el personaje principal, siendo este uno de los antagonistas de la historia, desde el momento que aparece crea una expectación de que puede ser un buen aliado pero el giro que tiene su historia es lo que te hace quererlo y odiarlo al mismo tiempo.

Las peleas, ya sean cuerpo a cuerpo o con armas de fuego están muy bien coreografiadas. La violencia gráfica es muy explícita y no es gratuita. Siempre están justificadas las acciones. No es una serie que requiera de muchos efectos especiales digitales, pero eso también ayuda a que se sientan más reales las situaciones.

Esta serie es recomendable ver, pero debes tener estomago de hierro para aguantar las escenas violentas y toda la sangre que llegan a salir a lo largo de la serie, obviamente al final de la serie te da a entender que va para más y que tendrá más temporadas este grandioso personaje.